Robert Owen
Pensador y activista del primer
socialismo británico
(Newton, Gales, 1771-1858). Hijo de un
modesto artesano,
tuvo una formación autodidacta y
prosperó como empresario
de la industria del algodón. En 1799
compró junto con otros socios
la fábrica textil de New Lanark (Escocia),
de cuya dirección se ocupó
en los años siguientes.
Robert Owen
Conmovido por las consecuencias
sociales de la introducción del
capitalismo durante la primera
revolución industrial, buscó la forma
de promover una sociedad mejor desde
su posición como empresario.
Su gestión fue un experimento
innovador, pues consiguió que la empresa
arrojara beneficios introduciendo mejoras
sustanciales para los trabajadores:
elevó los salarios, sentó las bases de una
seguridad social mutualista
y proporcionó a los obreros condiciones
dignas de vivienda, sanidad y educación.
Este último fue para él el objetivo
esencial, pues consideraba que una
educación liberal y solidaria sería el mejor
instrumento para acabar
con la delincuencia y poner las bases para
un futuro de justicia e igualdad.
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Inicio esta narración con la
presentación de algunas de las ideas de quien influyo determinantemente en mi
manera de pensar , lo cual me llevo a incluir dentro de mis acciones como
gerente de producción, acciones que reflejaron esta influencia.
Al igual que en su tiempo, hoy en día
es difícil hacer esos cambios que propuso, la renuencia de los empresarios a invertir en mejoras para
los trabajadores es algo que no se comprende y lo ven como un gasto que va en
contra de sus intereses, aún cuando se comprueba, como sucedió en mi caso, que
mejorando las condiciones de trabajo se eleva la producción y se mantiene un
equipo humano mejor calificado para cada puesto, ya que al estar dentro de un ambiente
agradable , bien remunerado y con incentivos, los trabajadores se mantienen
durante muchos años dentro de la empresa donde encuentran la posibilidad de
capacitación y progreso.
Para los hombres en general es
importante el tener la oportunidad de capacitarse, aprender algo nuevo es un
motivador muy fuerte y esto aunado a el incentivo económico y a condiciones
laborales dignas proporcionan la mejor herramienta para una empresa, ya que el
equipo humano es esencial para su buen funcionamiento.
Basándome en estos principios realice,
condicionado por aumentos de producción, las mejoras que los mismos
trabajadores me indicaron como primordiales para trabajar mejor.
Se les proporciono el equipo de trabajo adecuado para sus
puestos, transporte, comedor, instalaciones higiénicas adecuadas, un área para
deportes, cursos de capacitación.
Los objetivos en producción señalados
para realizar cada uno de esos proyectos de mejora, se alcanzaron en su
totalidad y se superaron en varias ocasiones por las aportaciones que los
mismos obreros realizaron para implementar estructuras y formas que permitieron
una producción mas eficiente con menos esfuerzo.
Las relaciones entre los empleados de
administración y los obreros se hizo mas estrecha y cordial, no solo por la convivencia
en el comedor y en el área deportiva o en los cursos de capacitación, sino por las
platicas que sostenía con mis colaboradores para hacerles notar la importancia
de cada uno en el funcionamiento de la empresa.
Me siento muy orgulloso de haber conjuntado un equipo de trabajo
excelente en donde mis colaboradores me apoyaron y gracias a ese apoyo se me
otorgo el control en las áreas de producción, personal, seguridad, almacenes y
embarques, además de una relación estrecha con ingeniería mecánica, que era
responsable de realizar los proyectos que considerábamos adecuados para mejorar
la producción.
Las satisfacciones que recibí durante
el tiempo que estuve al frente de esos departamentos fueron muchas, no solo al
ver que daban resultado las ideas que me habían impactado desde muy joven, al
leer en la preparatoria un libro de Benjamín Arredondo Muñoz Ledo, titulado
“Que es el hombre” sino porque al
involucrarme en la parte humana de esa administración, en las relaciones con
empleados de oficina y obreros, sobre todos con estos últimos, que con acciones
mas que con palabras me demostraron su apoyo incondicional para alcanzar las
metas propuestas, actuando como un verdadero equipo, involucrándose
responsablemente en sus tareas, pero sobre todo porque en las relaciones
diarias que sostenía con ellos en la nave de producción, podía notar que me
aceptaban como un líder confiable y con el que podían dialogar sin ningún
impedimento, ya que siempre procure, como parte de mi rutina, entrar a
saludarlos en cada turno y atender a sus demandas o sugerencias.
Mantener la buena relación con los
empresarios, socios inversionistas era un poco mas complicado, siempre
exigiendo mayores ganancias, ambicionando un crecimiento mas rápido y por
supuesto con menos gastos, se abstuvieron de intervenir y estrechar lazos conmigo, dudando de mis propuestas y del tipo de exigencias que hacia para alcanzar las metas que consideraban adecuadas a sus intereses,pero en base a proyecciones a futuro de la
producción se logro mantener el equilibrio adecuado entre la parte trabajadora
y la empresarial.
María Antonieta era el nombre de la
señorita que me asignaron como secretaria, fue mi brazo derecho sin duda, pero no
solo a ella, sino a cada uno de mis colaboradores les agradeceré siempre lo que
hicieron para realizar un buen trabajo.
Cuando me “renunciaron” fue algo
totalmente inesperado, no solo para mi, quienes formaban el equipo de empleados
y obreros y habían visto los logros alcanzados, que sabían de mi compromiso y
dedicación a la empresa, trabajando siempre con gusto en algo hicimos crecer y
convertirse en una compañía con muy buenas perspectivas, tal vez esto ultimo
fue lo que propicio el que los socios pusieran sus ojos en un gerente con mas
experiencia, con un currículum vítae sobresaliente que los condujera a un nivel
mas alto.
Tener que renunciar a mi trabajo ha
sido una de las peores experiencias, no se puede expresar el conflicto interno
que provoca el recibir inesperadamente un notificación en la que se dice que
por considerar adecuado a los intereses de los socios, se ha decido realizar
cambios en el organigrama y seré removido de mi cargo a partir del próximo día
tal , por lo cual el departamento de contabilidad se pondrá en contacto para
efectuar el pago que considere correspondiente y justo para mi liquidación definitiva.
Por supuesto que no hay pago por
semejante daño, ninguna remuneración económica puede resanar algo que llega a
lo profundo del alma y destroza de un golpe los sueños y la forma de vida de
una persona, pero es algo con lo que se tiene que lidiar cuando en las
relaciones empresariales y en otras áreas de las sociedades humanas.
Despertar un día sin el incentivo de
ir al trabajo, no tener ya relación con todas esas personas con las que una
compartió experiencias tanto tiempo es tremendo, me sentí totalmente
desubicado, no entendía que había pasado y estaba molesto, frustrado, incapaz
de iniciar otro proyecto o buscar otra trabajo al considerar que era totalmente
injusto lo que me sucedía.
Afortunadamente en el tiempo se van diluyendo nuestros sentimientos y
emociones.
Me recupere, prueba de ello es ahora
estoy escribiendo esta parte de mis memorias y puedo hacerlo sin sentir mayor
resentimiento por quienes decidieron mi retiro de esa empresa, tal vez añorando
un poco ese tiempo en que pude lograr varios de mis sueños y recordando a mis
colaboradores, amigos, jefes y personas en general con las que compartí esa
parte de mi vida.
Mi recuperación fue larga, entiendo
por eso a quienes se suicidaron, se hicieron adictos al alcohol o drogas,
llevan una vida auto destructiva, porque no es fácil levantarse después de un
golpe fuerte, afortunadamente yo he contado siempre con el apoyo de mi familia,
ese apoyo es fundamental en esas circunstancias. No hay forma de expresar y calificar lo mucho
que significa tener al lado a quienes nos aman, dando cuanto pueden moral y económicamente
para dar animo a quien ha caído.
Aprendí que no podía comprometerme
incondicionalmente en ninguna empresa que no fuera propia, depender de decisiones
ajenas era muy riesgoso , de modo que en el futuro emprendería mis propios
proyectos, encontrando nuevos alicientes para rehacer mi vida. De eso escribiré mas tarde.