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El Gran Libro

El Libro Cuando nació la idea de escribir fue como la tormenta que de pronto aparece en el horizonte anunciando con relámpagos y truenos...

Doogy

Tenia un perro al que nombre Doogy, era pequeño y peludo con largo bigote y siempre parecía estar muy atento a lo que yo hacia y decía, como si entendiera perfectamente lo que pasaba, un día lo estaba mirando y pensé, si Doogy hablara me diría seguramente que los hombres nos complicamos demasiado la vida de gratis, nos metemos en situaciones dificiles de una forma muy tonta, siempre deseando mas, compitiendo por ganar lo que sea, aunque sea el mejor lugar en el estadio de fut o tratando de conquistar la muchacha mas linda sin percatarnos que tal vez sea una mala decisión, diría que estamos medio locos porque deseamos conquistar y dominar todo sin poder conquistarnos y dominarnos a nosotros mismos, nos pasamos la vida acumulando y atesorando pertenencias que jamas serán realmente nuestras, las dejaremos al final del camino, lo peor es que ni las disfrutamos por anhelar tener mas y seguir buscando, como decía la abuela "buscando tres pies al gato"
  Hacemos grandes planes y proyectos como si fuéramos a vivir eternamente, nos convertimos en objetos de uso y nos vendemos al mejor postor simplemente porque ser mejor pagado representa renombre, notoriedad, el reconocimiento llena nuestro ego, la opinión de los demás es mas importante que nuestros verdaderos intereses y sacrificamos cualquier cosa por ese "éxito", por si fuera poco intentamos interpretar a Dios, le designamos cualidades acordes con nuestro deseo y le pedimos las cosas mas absurdas, sin dudan que nos falta mas de un tornillo y ese perro vive mucho mas tranquilo que yo.
Resultado de imagen para perro schnauzerSe me ocurrió que cuando me miraba con sus ojos casi escondidos en su tupidas cejas pensaba que yo era un tipo raro porque diariamente acostaba muy tarde viendo cosas que no eran importantes para mi vida y por las mañanas me lamentaba de no haber dormido bien y tener que levantarme temprano, me desayunaba cualquier cosa, salgo presuroso al trabajo, me la paso en la rutina y hago citas con amigos y amigas para convivir, según la costumbre vamos al bar, al café o al cine, pero me hago las ilusiones de que soy libre, que hago algo que vale la pena y que estoy viviendo como deseo,  ha de pensar mi perro que estoy mas que rematado y no me percato de mis locuras, se ha de preguntar para que trabajo si no soy capaz de disfrutar de paz y de las cosas bellas que ofrece el mundo, ni siquiera puedo tener relaciones afectivas, amorosas, sexuales que realmente me hagan sentir bien, porque los humanos, no somos tan humanos como presumimos, ni tan inteligentes como pregonamos.  Un perro simplemente sabe cuando una perra tiene ganas de compañía, no se complica la existencia con celos o con andar intentando conquistarla comprando regalos, llevando serenata, invitándola a cenar o haciendo el ridículo para divertirla, simplemente se presenta como candidato, si la perra acepta ya se hizo la fiesta, no hay problema, se la pasan bien hasta que se cansan y luego se despiden sin mayor preocupación ni compromiso, si hay oportunidad se vuelven a encontrarse en otra ocasión .

   Imaginen lo que ha de pensar de nuestras religiones, de nuestro supuesto vinculo con Dios, construyendo grandes iglesias, templos, mezquitas  que luego pasan a ser museos, atracción turística, bibliotecas o cualquier otra cosa porque se nos pasa el fervor, porque nos confundimos continuamente y al no encontrar respuesta a nuestras plegarias cambiamos de rumbo y emprendemos una nueva forma de religión , ahora la ciencia, la tecnología , le vamos a los super héroes  o a las ciencias ocultas, total el caso es que nos hacemos pelotas como de costumbre.   Los perros seguramente no se preocupan por eso de los pecado, nadie les molesta de que serán condenados por sus actos ni les caen en los grandes vicios, adicciones, corrupción , etc., que tienen los hombres, simplemente viven y dejan vivir, defecan donde les gusta, marcan su terreno con orines, nada de graffity o cosas por el estilo, el arte les tiene sin cuidado, las modas también y el ser famoso les vale un pito, están  mas que felices con una buena comida y suficiente agua, un paseo por el parque , jugar con otros perros, menear la cola a los que les caen bien y ladrar con disgusto a los que no, andar por el barrio orinando y olfateando para reconocer quienes son vecinos perros y quienes han llegado nuevos, porque para ellos el aroma es lo que cuenta.   En fin, la conclusión después de ver lo bien que se la pasaba mi perro es que nadie puede decir que tenemos vida de perro, estos animales si saben vivir, nos dan clases de como disfrutar sin complicaciones y ahora con tantas atenciones que se les tiene seguramente nos han de compadecer.