Alerta cósmica

// ALERTA DE CUARENTENA INTERPLANETARIA //

CODIGO: XENOS-OMEGA

AVISTAMIENTO: Planeta Clase-G, tercero en su sistema. Señales bioquímicas indican una biosfera anteriormente diversa y resiliente, ahora en declive terminal.

ESPECIE DOMINANTE: Designada "Homo sapiens".

CARACTERÍSTICAS OBSERVADAS:

· Tecnología: Nivel industrial primitivo, desarrollo desequilibrado. Domina la energía termoquímica y nuclear primaria, pero carece de control de entropía.

· Comportamiento Social:

  · Exhibe una agresividad intraespecífica patológica y ritualizada. Se organiza en facciones que se hostigan constantemente.

  · Demuestra una incapacidad sistémica para equilibrar sus necesidades a largo plazo con la salud de su ecosistema. Opera bajo la lógica del "parásito", consumiendo su anfitrión hasta colapsar.

  · Paradoja Cognitiva: Posee inteligencia abstracta suficiente para comprender conceptos como "sostenibilidad" o "bienestar", pero su estructura social premia la explotación a corto plazo. Esta disonancia lo vuelve impredecible y peligroso.

· IMPACTO PLANETARIO:

  · Contaminación geosináptica (química, plástica, radiactiva).

  · Extinción masiva en curso, acelerada artificialmente.

  · Alteración de los ciclos atmosféricos y oceánicos a nivel geológico.

EVALUACIÓN DE RIESGO: EXTREMO.

RECOMENDACIÓN: NO SE ACERQUEN. Cuarentena permanente. La especie muestra todos los signos de una "Inteligencia Autolítica": una forma de vida cuyo desarrollo cognitivo no va acompañado de la sabiduría ecológica para autorregularse, condenada a autodestruirse y destruir su biomasa anfitriona en el proceso. El riesgo de contagio de sus patrones disfuncionales o de una interacción violenta es demasiado alto.

NOTA DEL ANALISTA: Es una lástima. Los registros fósiles sugieren que el planeta fue una vez una joya de la biodiversidad galáctica. Observar su lento declive es un recordatorio trágico de que la inteligencia, sin una ética de coexistencia, es solo un instrumento de suicidio más eficaz.

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No somos los amos de un planeta que nos pertenece, sino los inquilinos problemáticos de una casa que estamos incendiando, tan peligrosos que el vecindario cósmico, de existir, pondría un letrero de advertencia gigante alrededor del Sistema Solar.

"No se acerquen a ese planeta" es el veredicto final sobre una especie que, habiendo tenido la oportunidad de ser la conciencia de su mundo, eligió convertirse en su cáncer.

JuanAntonio Saucedo Pimentel