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viernes, 13 de marzo de 2015

reflexiones del jardinero

El jardinero contestaba con citas que dejaban claro lo que deseaba expresar, he reunido algunas que aquí se muestran:


Si deseas una vida digna, has que sea como un jardín , proporciona, paz, alegría, belleza.

crece como un árbol con las raíces bien fincadas, el tronco fuerte y derecho, las ramas extendidas a lo alto y dando sombra y frutos indiscriminadamente.

aun los arboles caídos son útiles, algunos son puente sobre un río, otros son materia para obras de arte, construcción o para hacer un buen fuego.

Si siembras buena semilla, la abonas y cuidas con esmero, tienes grandes posibilidades de obtener una buena cosecha, lo mismo sucede con tu vida.

El alma como la tierra que da buenos frutos, se debe abonar adecuadamente.

Las ramas de un árbol no son idénticas, pero cada una cumple la función necesaria para mantener el equilibrio.

La variedad de plantas es inmensa y gracias a ello el mundo es un lugar hermoso, deja que tu vida sea una gama de expresiones que reflejen lo que existe de bello en tu espíritu.

Destruir la naturaleza es un crimen de lesa humanidad.

Quien no aprecia las plantas difícilmente aprecia la vida.

Duda de quien afirma que ama la vida mientras derriba un árbol

Recibe los dones del universo como las plantas reciben la lluvia sin deseos egoístas .

El oro en ocasiones es menos valioso que la sombra de un árbol

El oro por si solo no es abono para una buena cosecha.

Las plantas regalan incondicionalmente.


Si destruyes la vegetación y derribas arboles no te extrañe mañana vivir en un desierto.

Los arboles fuertes no caen con las tormentas, procura ser como ellos.

Las plantas no pierden la fe, saben que la lluvia ha de llegar y se preparan a tiempo.

Arbol de buenos frutos, será asediado hasta que se hallan agotado. quieres vivir tranquilo , se como un arbusto.

En cada temporada el árbol se renueva, crece, se fortalece, ofrece sin restricciones su sombra y sus frutos, algo tenemos que aprender de esas cosas.

No se siembra ni se cosecha antes de tiempo.

Quieres cosechar, siembra primero y cuida con esmero.

Las flores que cultives en tu alma no se han de secar con el tiempo.

El mejor cultivo se ve solo con el paso de los años.

Cuando un jardín ha sido bien cuidado despierta la admiración del invitado.

La tierra estéril puede ser un campo florido si hay un buen jardinero que sepa de cultivo.

Las flores brillan como hadas  por la mañana y se convierten en sombras por la noche.

Un buen árbol nunca deja de dar frutos.

El árbol no teme ni se resiste a los cambios, se ajusta al proceso de vida natural.

Cuando alguien diga que las cosas buenas no se dan en abundancia, miren a la montaña, el cielo, el mar, pradera o al bosque y miren lo que Dios ha regalado.


Quien ha sabido vivir no teme morir.

El sabio no sabe mas que tu o que yo, pero ha aplicado los buenos conceptos en su vida.

Saber puede ser mas sencillo que hacer.

Un fruto podrido debe retirarse de los buenos frutos antes de que los contamine.

El árbol torcido es fácilmente reconocible.

Difícil resulta querer enderezar un árbol torcido.

No temas tocar la tierra, es el principio para subir al cielo.

El jardinero escucho a un padre quejarse de las diferencias entre sus hijos y dijo:
no quieras que las ramas de un árbol sean idénticas, perdería su natural belleza y equilibrio.

No te afanes en hacer lo mismo que los otros, has lo que te corresponde de la mejor manera.

Las diferencias de formas y colores son contrastes que la naturaleza utiliza para mostrar que no es la igualdad lo que mantiene el equilibrio, sino la diversidad lo que le hace bella y resistente.

Las plantas se bañan con la lluvia, danzan con la brisa, descansan por la noche, brillan con el sol y se muestran en toda su belleza cada día.

Los jardineros sabemos que las plantas crecen mejor cuando se les trata con cariño y se les habla con ternura.

Al mirar a la copa de los arboles puedes adivinar que tan profundas y extensas son sus raíces.

No pidas peras al olmo.

Quien observa con atención termina en la devoción .

Quien tiene tiempo de pasear en un hermoso jardín se emociona con su belleza, quien hace un jardín se complace en la meditación y en la compañía de Dios.

Se atribuye a Moliere la siguiente frase : los mejores frutos son de arboles que crecen despacio.

De Jalil Gibran :  el amor crece como las rosas, entre espinas y trabajos.

                     enlace a video      JuanAntonio Saucedo Pimentel. 








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