Mientras el profesor Bradley estudiaba física cuántica y pasaba la mayor
parte del tiempo en el edificio de la universidad hablando con otros
científicos sobre temas que la mayoría de los mortales no comprendemos se
sentía como pez en el agua, pero cuando asistía a reuniones sociales o
familiares donde se conversaba de las cosas que suceden en el entorno se
incomodaba, era como si lo trasladaran a un mundo donde no había cosas
interesantes, esto le hizo pensar que tenia un serio problema de adaptación y
decidió comentarlo a uno de sus mejores amigos.
Robert Majara estaba estudiando los efectos en la mente provocados por
diferentes eventos, condiciones y ejercicios, se le consideraba uno de los mas
sabios en lo relacionado al cerebro y sus funciones , nadie mejor que el para
aconsejarle que hacer para cambiar su actitud e integrarse de una mejor forma a
la vida social y familiar. lejos estaba
de imaginar que pasaría todo lo contrario.
Majara lo escucho pacientemente y con mucho
interés, le hizo algunas preguntas como si fuera un doctor que buscara indicios
de un padecimiento para diagnosticar con certeza y dar el tratamiento adecuado,
le invito a su laboratorio proponiéndole que se sometiera a un estado de
meditación controlada, durante ese periodo le serian repetidas frases que le
ayudarían a sentirse mejor en cualquier evento. No lo pensó dos veces, acepto de inmediato
porque era sumamente penoso no aceptar invitaciones a reuniones con amigos,
colegas o familiares por su forma de ser.
Las sesiones iniciaron un lunes a las cinco de la mañana, Majara dijo
que era una hora adecuada porque se salía del estado somnoliento y se
despertaba al consciente total, era como si en las primeras horas del día se
traspasara una frontera entre los sueños y la realidad.
Le conectaron electrodos para medir sus
reacciones físicas y mentales, le acomodaron en una cama e inicio un repetido
sonido agradable que se fue haciendo mas tenue conforme pasaban los minutos, el
no se percato en lo absoluto que al mismo tiempo se incluían palabras que lo
condujeron a un profundo estado de meditación y que estaban relacionadas con el
recuerdo del primer beso.
La mayoría de las personas recuerda donde
y con quien recibió el primer beso y se
emocionan al recordarlo, es una reacción natural instintiva porque la mente
tiene registrados muchos detalles de esa sensación nueva, de algo que abre la
puerta a una dimensión de sentimientos y emociones grandiosas que conducen al
amor en sus diferentes manifestaciones.
Aun en Bradley, el sereno, frio,
calculador científico, esa experiencia seguía guardada en lo profundo de su
inconsciente y conforme se fue acercando
de nueva cuenta a ese momento le hizo experimentar fuertes emociones, los
aparatos del laboratorio registraban las alteraciones y el equipo de Majara,
compuesto en su mayoría por jóvenes que estudiaban en la universidad , se
vieron unos a otros con gesto de alegría por saber que algo verdaderamente
interesante estaba sucediendo en la mente de su maestro de física cuántica.
Bradley estaba en la cochera de la muchacha mas bella que jamás hubiera
conocido, se tocaban suavemente las manos mirándose a los ojos , ella sonreía y
agradecía la invitación a salir y lo
bien que la había pasado , el apenas escuchaba, estaba extasiado admirando sus
ojos, sus labios, su pelo, su rostro completo era increíble tenerla tan cerca,
percibir su aroma, su voz, tocarla y casi sin notarlo se fue acercando mas y
mas hasta sentir sus labios con los suyos . Fue solo un instante, ninguno de
los dos era experto en besos, eran apenas unos adolescentes que entraban por
vez primera en ese tipo de relación y fue algo maravilloso, mágico, porque el
mundo en ese preciso instante se hizo mas brillante, experimento Bradley la
misma alegría, la euforia , el placer, la sensación de volar y querer gritar
para anunciar a todos que lo había logrado, había besado un sueño.
Los aparatos registraban el más alto
grado de excitación , Majara indico que era tiempo de sacarlo del trance, se
inicio el proceso y en pocos minutos Bradley despertó, se le notaba feliz y
solo comento a solas con Majara la experiencia, pero el equipo sabía por donde
había sido conducido y recibirían el reporte con detalles de parte de su
maestro para conocer los resultados y dirigir el próximo experimento.
Durante varios días Bradley se vio mas
dinámico y mas alegre , se notaba que había recibido una buena dosis de
incentivo , se acerco mas a su familia, hablo con algunos colegas en la
cafetería, se le vio incluso en las instalaciones deportiva nadando y riendo
con estudiantes. Lo que nadie imaginaba es que Bradley había iniciado un
proceso de meditación por su cuenta, cada mañana a las cinco en punto dedicaba
una hora por lo menos a esa practica, retornaba a la experiencia del primer
beso, se llenaba de las sensaciones increíbles de ese momento y cuando salía de
la meditación estaba cargado de una energía juvenil que se reflejaba en todo lo
que hacia.
Caminaba por los pasillos de la universidad y se le vino la idea de
saber que había sucedido con esa muchacha con la que experimento por primera
vez las caricias de una mujer, para entonces tendría unos cuarenta y cinco años
ya que el era mayor por tres años, seguramente se había casado y tendría hijos,
a menos que fuera otra científica loca metida entre libros y experimentos como
el, lo cual era muy improbable, se le ocurrió que alguno de los estudiantes que
llevaba informática le podría ayudar a localizarla, ellos estaban muy al tanto
de cómo buscar en las redes sociales . Se sintió animado por esa idea, tenia
verdadera curiosidad por saber que había sucedido con su Dulcinea , se sonrió
pensando en esta idea.
No paso mas de un día para recibir los datos completos para
localizarla, Nombre, dirección, estado
civil, profesión, etc., el joven que se la proporciono le dijo “ fue sencillo,
Sayra Saumet no es un nombre común, esta
en el face y tiene ahí fotos y todo su perfil completo, parece una mujer feliz,
bonita la señora” lo que no le dijo es que era viuda y sin hijos . rápidamente
le mostro como buscarla en la red y lo dejo sentado ante la computadora,
Bradley tardo algunos minutos en intentarlo , estaba emocionado, su corazón latía
con fuerza y no podía creer que eso le causara tanta excitación. Tecleo el nombre en el buscador y vio
aparecer el menú de opciones donde localizarla, dio clic sobre el de la pagina
del Facebook y ahí apareció lo que
buscaba. Por un instante el tiempo pareció detenerse, observo su foto del
perfil y le pareció aun hermosa pero ahora había aunado una gran personalidad , se veía elegante
hasta en su peinado, con una gargantilla fina que hacia juego con sus aretes,
su mirada era serena y brillante, una pequeña sonrisa en sus labios tal como el
la recordaba. Tomo nota de la ciudad
donde vivía con la resolución de llamarle por teléfono. Ahí mismo marco desde su celular, espero
mientras escuchaba los tonos de llamada, se corto una vez, como si hubieran
rechazado la llamada, lo intento de nuevo y escucho la voz que aun tenia como
un tesoro en sus recuerdos, se quedo mudo un momento mientras ella preguntaba,
¿Quién llama?
Soy Richard Bradley contesto,
¿quién? Richard, nos conocimos
en tu fiesta de quince años, salimos un tiempo juntos y después me fui a
estudiar lejos de ahí , ella le interrumpió, “no conozco a ningún Bradley , seguramente
esta equivocado” colgó sin darle tiempo a replicar. Se quedo desconcertado, no podía creer que
lo hubiera olvidado del todo, le habría sucedió algún accidente que le ocasiono
perdida de memoria? , nunca había sido
importante para ella esa relación y por
eso lo olvido? , estaba molesta y por
eso negó conocerle? Esas y otras
preguntas le estaban asaltando cuando sonó su teléfono, rápidamente contesto
porque vio que le estaba devolviendo la llamada, la escucho reír mientras
decía, me da gusto saber de ti después de tanto tiempo, por supuesto que me
acuerdo del chico que me dio mi primer beso.
Ese fue el principio de largas conversaciones recordando los tiempo de
juventud, narrando lo que habían pasado después de separarse, preguntando por
amigos mutuos, indagando cada detalle de sus vidas sintiendo que aun
permanecían unidos por ese lazo invisible que se forma con los sentimientos
profundos.
En una de esas conversaciones llegaron al tema del primer beso, ahí sucedió
algo completamente inesperado para Bradley, ella recordaba una escena
completamente distinta, el lugar, la hora, la forma como se habían dado los
hechos, era como si hubiese vivido con alguien mas esa experiencia, y cuando el
narro su versión ella simplemente le dijo, lo has soñado, eso no fue así, no
estábamos en la cochera de mi casa después de un largo paseo, sino en un
parque, no estábamos de pie, sino sentados, no era noche, sino un atardecer
hermoso , no eran autos los que nos rodeaban sino arbustos de flores y no fue
tan fugaz como lo dices, sino un beso largo, que me hundió en el placer y me
hizo querer repetirlo muchas veces, afortunadamente eso sucedió en los meses
que duramos como novios.
El no lo podía creer, de donde había sacado esa historia, el recordaba
perfectamente el lugar, la hora, incluso el color y modelo de los dos autos
estacionados en esa cochera.
Representación de la realidad:
Comentando con Majara sobre el particular se fue adentrando en el
conocimiento de cómo funciona el cerebro y como las neuronas tienen funciones
especificas que aun no son del todo conocidas y que muchas veces la realidad no
corresponde a la interpretación que nuestro cerebro hace de la misma. Comprendió
que en el transcurrir del tiempo el y Sayra habían elaborado una representación
de ese primer beso que correspondía a sus propias idealizaciones, a lo que se
ajustaba a deseos que satisfacían ciertas características o detalles de un
momento tan importante.
Así que la princesa del cuento no estaba deschavetada, el no era una
enciclopedia ambulante ni tenia la verdad absoluta de nada, incluso de sus
propias experiencias, porque su representación de la realidad se ajustaba de
acuerdo a conveniencias que se determinaban en su cerebro de manera autónoma,
lo cual era peor que meterse en el laberinto del Minotauro, porque resultaba
difícil de comprender y no parecía tener una respuesta sencilla. Resolvió no seguir indagando sobre el asunto,
no se trataba de ningún asunto científico sino de algo romántico que sucedió en
su vida, algo que le sacudió y le hizo sentir mas vivo que nunca, que solo se
podía comparar con la emoción causada cuando fue invitado a participar en el
centro de investigaciones en Suiza o cuando recibió su doctorado en física
cuántica.
Hoy en día sus ocupaciones le
mantienen alejado de una vida romántica, de una aventura apasionada o de una
relación amorosa que pudiera hacerle vibrar , pero de vez en vez despierto o
dormido su mente trae algo de aquella experiencia que le dejo marcado para
siempre.