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domingo, 5 de mayo de 2019

Cosmos diferente

nuevo pensamiento
JuanAntonio Saucedo
5 de mayo de 2019


El origen 
Un principio del cosmos de pensamientos brotando en un manantial con el solo percibir un rostro donde se reunió la belleza, la inocencia, el misterio, el significado de los sentimientos mas profundos y las emociones que hacen que la vida se produzca con la magia de los dioses que en algún paraíso se reunieron para esculpir la figura perfecta, dotarla de los mejores atributos y dejarla flotar sin rumbo para observar los efectos que podía causar al ser descubierta por los hombres y en esa curiosidad se dieron a la tarea de imponerle también un sabor exquisito a sus besos, un aroma delicioso a su cuerpo, la alegría en sus gestos, el placer como un guardado secreto que se pudiera encontrar por quienes tuviesen la oportunidad y la gracia de ser ser aceptados en su lecho, lo que no imaginaron es que eso pudiera dar origen a una serie de eventos que transformaría para siempre las condiciones del universo conocido, que se iniciarían las luchas por obtener tan preciado tesoro, que abrían las puertas a un sinnúmero  de padecimientos por desengaños, celos, deseos, desesperados intentos de ganar un sitio en un corazón al que olvidaron ponerle aquello que lo hiciera perfecto para el amor humano. 

hoy mientras espero la nacimiento de pensamientos nuevos, cuando la mente la he llevado al punto del olvido, he borrado las experiencias y cuanto puede resultar en un recuerdo, estoy seguro que se ha de formar un cosmos con elementos diferentes, donde los colores, aromas, formas, texturas, se mezclen  para hacer figuras que nunca han sido concebidas, que jamas se le ocurrieron a otro hombre, ningún dios se propuso esta forma nueva de crear de la nada un todo en donde el orden de las cosas se hace en la proporción exacta para no causar daño alguno en el sentir de aquellos que participen de la actividad consciente y encuentren en la belleza una constante fuente de placer que no tenga a la mujer o al hombre como centro de ese reino, ni sean sus ambiciones  causas de egoísmo, entendiendo que no es suyo aquello que no ha producido con su talento ni con sus afanes, que son actores en la obra donde cada evento ha sido planeado para su bienestar y su alegría, pero no en forma individual, sino en la forma compartida en la que el gozo se expande de acuerdo a los motivos que se realizan en conjunto, de esa manera no hay lugar a las envidias, a ver de manera diferente, a percibir lo que existe como un objeto de comercio, de tal manera que la gente es sencilla y vive en paz consigo mismo, pero hay un elemento que es necesario reconocer e intentar que no sea causa de frustraciones y conduzca a desesperados actos que no se pueden calcular, el aburrimiento, la certeza de que las cosas están y estarán bien sin importar el tiempo ni las acciones, que todo se ha de acomodar perfectamente sin importar las intenciones y que al final el resultado ha de ser el mismo, no lo podrían soportar los hombres que hoy están en la tierra, su capacidad mental va en otras direcciones, la lucha, la competencia es algo que les fascina, les atrae la aventura, el misterio, descubrir algo nuevo, encontrar los tesoros escondidos, ver lo que otros no han visto, crear lo que otros no han podido hacer, llegar a los limites de sus fuerzas, alcanzar grandes objetivos con mucho esfuerzo y por supuesto encontrar al ser que les haga gozar y sufrir al mismo tiempo porque son incapaces de llegar al placer inmenso sin antes compararlo con el dolor profundo. 

Entonces abandono el proyecto y dejo que el cosmos de ideas se adapte a lo conocido, permito que el espacio se llene de las sombras y las luces, que los colores y aromas se acomoden según se han conocido desde el principio de los tiempos, que las formas sean como siempre y las todos y cada uno de los elementos se ordenen como los hombres lo han querido.  Sin duda esto es lo que impone sus deseos, las guerras, los continuos martirios en que son sometidos para luego lanzarse a la conquista y sentir que han vencido cuando logran salir de un laberinto de antemano construido, es un juego que les hace vivir de forma interesante, bueno es reconocer que no pueden hacer las cosas de manera distinta, esta marcado su rumbo por le dolor y el placer, beben ciertamente esos filtros en la misma copa, se dejan conducir por senderos escabrosos para alcanzar las cumbres, para sentir la libertad cruzan los pantanos de la servidumbre, para conocer el amor se hunden en sus odios y para conocer a Dios danzan con sus demonios. 

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