Entrada destacada

El Gran Libro

El Libro Cuando nació la idea de escribir fue como la tormenta que de pronto aparece en el horizonte anunciando con relámpagos y truenos...

sábado, 6 de febrero de 2021

POR AMOR


 



Nos convertimos en exploradores, en experimentadores, en conquistadores de un cosmos donde solo existía la pasión y el amor formando galaxias de placer, sinfonías que deleitaban los sentidos, transformaban el tiempo y el espacio en dimensiones confundidas entre lo efímero y la eternidad. 


Fueron tiempos de total libertad para demostrar que el amor era generador de belleza, de sublimes obras que dos seres fundiendo sus almas, sus pensamientos, sus corazones en concierto de oraciones escritas con caricias, con besos apasionados, risas, gemidos, el empapado fuego prendido con frenéticos intentos de alcanzar un extasíe perdido en sus propios inicios, originado en el infinito universo  del  suave rose de la piel y el terso viaje por la dicha pintada de noche o de día, de cualquier hora sin minutos, sin deseo de medir o configurar un verso escrito en las estrellas o en la figura de un cuerpo desnudo que se entrega sin restricción alguna. 


Fuimos niños inocentes descubriendo la vida, caminado, volando entre los sueños, a fantasía, la realidad que invade los momentos, que origina pensamientos proyectados en todas direcciones, en argumentos configurados sin limitaciones, dejando que las emociones y los sentimientos marcaran el rumbo en un viaje que se hizo eterno dentro de un sueño profundo que pintaba la realidad con hermosas tonalidades de brillante colorido y formas nunca antes realizadas, fueron las risas y los cantos, la música de nuestros propios corazones, el ritmo del sentimiento que se hace movimiento, en pretendido desliz dando motivos para seguir continuamente en el mismo juego, en el mismo paisaje que se transforma conforme se adopta la posición adecuada, mientras se susurran dulces poemas en silencio y se escribe en el blanco de la piel con tinta invisible el verso,  la oración que agradece a Dios la oportunidad de haber llegado a este punto en el que se reconoce que hay mas de la vida cuando se encuentran dos almas con la intención de ser instrumento del amor, de la pasión, de la fulgurante inspiración que lleva a no terminar jamas de explorar los confines del propio universo. 

JuanAntonio Saucedo Pimentel 

No hay comentarios:

Publicar un comentario