Jamas me vi como tu me viste
Esas palabras se que quedaron grabadas toda la vida, para entender que ciertamente nosotros jamas nos percibimos como otros nos perciben, cada uno de nuestros encuentros con una persona proyectamos una imagen distinta o mejor dicho, cada uno de ellos nos ha de captar en su memoria de una forma particular, adecuada a la situación, al entorno, a la particularidad del encuentro , de tal manera que no soy uno, sino ciento de proyecciones, de imágenes distintas, de personas con las que me relaciones en distintas situaciones, familiares, de estudio, trabajo, sentimentales, conflicto, festejo, etc. Pero también yo he grabado en mi memoria una imagen particular de las personas con las que me relacione, nadie tendrá esa misma imagen, porque cada uno percibimos en tiempo y espacio distinto a esa persona, cada uno tuvo su relación especial, singular, que enmarco la forma como se mantuvo ese encuentro, las consecuencia del mismo, simbología en la memoria que ha de plasmarse en el mural completo de lo que fue la experiencia a lo largo del existir. Algunas imágenes se difuminan con el tiempo, otras se resaltan, evolucionan, se distorsionan hasta quedar irreconocibles cuando se trata de ponerse de acuerdo en lo que era un personaje en especial, esto depende del impacto positivo o negativo que nos haya causado.
Es muy probable que las imágenes mas claras y las de mas relieve en nuestros recuerdos se encuentren entre las personas que tuvieron una influencia transcendental en nuestro existir, aclarando que no siempre hay padre o familiar cercano en ese mural, porque no todos tienen la fortuna de tener esas figuras en su niñez, ademas hay algunos elementos o factores que afectan de manera anómala a muchos de nosotros, por eso es importante saber que hay personas que jamas van a comprender lo que nosotros tratamos de trasmitir sobre las vivencias, emociones que se han tenido en un ambiente que consideramos normal en la familia, en el entorno de la misma.
Hasta aquí las reflexione serias intentando dar una explicación a las distintas percepciones y proyecciones de una persona, pero que pasa cuando alguien te confunde, cuando se dan esos encuentros con personas que se parecen a alguien que tenemos en nuestra memoria de manera especial, en mi caso me han sucedido tres casos en los cuales, a pesar de que intentaba hacer notar que me estaban confundiendo, los acontecimientos se dieron de forma que aprovechara esa confusión para entablar una relación mas profunda y en otra para ser atendido de una forma especial. Ahora se los paso al costo.
Cuando tenia alrededor de veinte y tantos años , estudiaba en una instituto de computación que estaba situado en un edificio de varios pisos. En cierta ocasión subió al elevador una señorita muy bonita, ojos verdes morena, de figura como las que receta el doctor para levantar el animo, me saludo con una gran sonrisa y empezó a disculparse por no haber subido a verme, había estado muy ocupada, pero ya estaba en sus planes subir pronto para hablar conmigo. Me causo sorpresa y al mismo tiempo gusto que alguien tan atractiva me dirigiese la palabra de manera tan familiar, así que no hice el menor esfuerzo por sacarle del error, por el contrario, rápidamente le dije que si no tenia inconveniente podría acompañarla y mientras ir platicado para conocernos, lo cual le pareció muy bien y agradeció que lo hiciera porque ella siempre se ponía nerviosa en las entrevistas. Deduje que tenia que ir a una entrevista de trabajo y que la cita era con alguien que tenia un enorme parecido conmigo, ni que decir el gusto y emoción que ya me invadían, estaba en el mejor momento para seguir conociéndole y ya vería el modo de componer la situación. La invite a tomar un cafe, no acepto, pero seguimos conversando mientras caminábamos rumbo a la estación del metro donde abordaría su tren. En pocos minutos se estábamos como dos viejos amigos conversando de una y otra cosa sin tocar siquiera el tema principal, la causa de la supuesta entrevista que tendría con el que se aprecia a mí. Subí al tren con ella y continuamos la platica, nos bajamos comentando sobre una de las mas recientes películas que los dos ya habíamos visto y de pronto me remordió la consciencia, sin mas le dije que yo no era quien ella pensaba, le aclare las cosas y me miro abriendo sus ojos al máximo como si quisiera escanear mi alma mas que mi físico, No puede ser, esclamó alarmada, como me pude equivocar, es que usted es igualito, se lo juro, perdone la equivocación, se ha de haber estado riendo de mi bien y bonito, soy una tonta, pero le aseguro que le voy a mostrar al otro para que vea que no le he mentido.
Que no quedaos buenos vamos a tutear, ahora ya de nuevo nos hablamos de usted?, la equivocación a sido cosa del destino, ni dudarlo, me ha dado mucho gusto conocerte, no caigas en el error de creer que es una tontería, las cosas pasan porque tiene que pasar y espero que me aceptes como amigo ya que hemos visto que nos podemos llevar muy bien.
Fue el principio de un idilio que duro solo unos meses, la perdí en uno de esos arranques de tonto que continuamente dan cuando se es muy joven, los lapsus brutus continuos que me asaltaban me hizo cometer el gran error de dejar de verle porque no me pareció que tuviera coqueteando con uno de sus amigos, lo que seguramente hizo para ver si de verdad sentia yo celos, pero no imaginaba que mi reacción sería tan anormal, bueno son cosas que ni yo entiendo aun cuando las hice.
Pasaron años , paso frente a un salón de fiestas donde están en los últimos preparativos para un festejo de quince años, entro con la intención de pedir informes sobre los precios para efectuar ahí un evento y me confunde con el que había contratado para esa ocasión, con atenciones me llevan al centro de la pista, me muestras como se ven las luces, el acomodo de las mesas y la que ha de servir para la festejada, para mi y para su madre, me dicen que el grupo musical ya esta llegando, me preguntan que si todos los invitados ya han recibido la invitación y el pase para no tener problema a la entrada del salón, lo afirmo, digo que nadie ha de pasar sin ese pase autorizado, me invitan una copa, dos mientras me dan mayores pormenores y empiezan a llegar los invitados, la limosina con la quinceañera y su madre, me acerco a la entrada para recibirlas y en son de broma les pido su pase para entrar, me dicen que no les dieron, propongo que se queden afuera mientras les conseguimos permiso y enseguida entre risas las conduzco a le mesa de honor, la madre cree que yo soy el encargado o dueño del salón y como le he caído bien me invita a sentarme junto a ella, lo pueden creer ? todo saliendo como de una película de comedia, pero es cierto, espero que algún día, la joven que cumplió los quince lo confirme, pero el caso es que yo me pase el festejo bailando con la madre de la festejada, guapa la señora, me hubiese gustado seguir mintiéndole hasta que la conquistara, pero mi conciencia no me lo permitió y a las doce de la noche, después de bailar el vals y de brindar por la felicidad, le dije lo mentiroso que yo era, al principio casi me fulmina con la mirada, creo que estuvo a punto de soltarme unas cachetadas guajoloteras para que se me quitara lo gracioso, pero se contuvo, me dijo que de castigo bailaría con ella toda la fiesta y que mas me valía comportarme o llamarla a los de seguridad para que me enviaran a la delegación por suplantar al dueño del salón, cosa que no era cierto, yo nunca dije ni hice nada para que lo pensaran, la percepción que ella y otros tuvieron fue lo que condujo a esa conclusión, aun ahora me sigo riendo de todo lo que sucedió esa noche, de maravilla por una una confusión de la que yo fui el menos culpable, digo, yo no estaba confundido, fueron ellos .
Pasaron los años, ya estoy mas viejo, voy a un pueblo y me acomodo en uno de los banquillos para que me den brillo en los zapatos, estaba ahí los transeúntes pasar, observando las diferencias en su vestir y comportamiento comparado con los de la ciudad, veo que un hombre me mira y de inmediato se atraviesa la calle para venir a saludarme, esta a punto de quitarse el sombrero como si yo fuera una autoridad a la que deseaba presentar su saludo, súbitamente se detiene, me mira y luego pregunta a quien me estaba lustrando el calzado, no es ? , el alza la vista me mira con detenimiento y contesta: no, no es. El tipo se retira un tanto apenado y yo pregunto, con quien me confundió, me aclara el bolero que me parezco mucho a un doctor que es muy conocido y respetado en el pueblo.
Ya por la noche estoy en un festejo en ese mismo pueblo, soy invitado de una de las familias fundadoras, muchos son los asistentes, los meseros van y vienen entre las mesas sirviendo platillos y bebidas, de pronto un mesero se me acerca y me dice cuantas la traigo para empezar doctor? le miro fijamente intentando que reconozca su error, pero no obtengo el resultado esperado, me dice que el estará pendiente de lo que se me ofrezca y me pone al frente una cubeta de cervezas en hielo. Nunca he sido bueno en eso de ingerir bebidas alcohólicas, soy abstemio por naturaleza, me ha causado daño cuando he intentado seguirles el juego a los amigos, así, que las cervezas se quedaron ahí, tome solo una para mitigar la sed porque no había otra cosa a la mano, pero el mesero cada vez que regresaba me preguntaba si estaba enfermo o que si prefería de otra marca, le dije que no deseaba tomar esa noche y concluyo que si me estaba sintiendo mal.
Nunca lo pudieron convencer de que yo no era el doctor y yo intrigado pregunte quien era aquel personaje al que tanto me parecía, su historia en pocas palabra es la siguiente:
Hijo de una de las mejores familias estaba comprometido con una novia a la que adoraba, bonita y de buena familia también, eso de buena quiere decir con riqueza, ya saben que puede ser no tan buena pero si tiene poder y dinero ya se cargo con titulo también, el caso es que si eran buenos muchachos ambos, sus familias reconocidas por ser de las que mas contribuían al progreso del pueblo y por lo tanto objeto de respeto y admiración, los chichos siempre invitados a cualquier evento, que en los pueblos es la forma principal de diversión ya que no hay teatros, antros o cosa que se le parezca, la convivencia entre los que tienen mucho y los que no tienen mas que lo suficiente es constante y no hay mas que hablar cuando se trata de ir a festejar cualquier cosa, un buen pretexto para convivir y conocerse mejor.
El doctor en cuestión se acababa de graduar, veintisiete años y en pleno uso de sus facultades, las perdió en la tremenda borrachera que agarro un noche de mayo, cuando despertó estaba en la cama con una mujer de las que no eran de su clase, apenas conocida, de buena o muy buena apariencia pero que para nada tenia que ver con sus inclinaciones sentimentales, se quizo salir de la habitación sin despertarle, pero la puerta estaba asegurada por fuera, no le quedo mas que hacer ruido y despertarla para salir del recinto, cual fue su sorpresa que al abrir ella los ojos y mirarle, con tiernas palabras le dijo, buenos días mi amor ! como amaneció mi maridito del alma? queeee ? cuál marido, cuál amor ? barájale despacio que aun estoy medio mareado. Anoche nos casamos, el juez que vive aquí enfrente vino por indicación de mis hermanos para que se cumpliera con nuestro deseo, ahí en el tocador esta el acta. Nuestro querido doctor quedo comprometido y nadie le creyó que había sucedido sin su consentimiento, por lo menos durante algún tiempo, porque se hizo el mas mujeriego y bebedor de la región, pero eso si, muy buen medico y filántropo de corazón, siempre ayudando a los mas necesitado, porque el hizo buenas inversiones, negocios que le dejaron riqueza, pero siempre repartía con los pobres, con los que consideraba desafortunados, productos de una accidente, de una equivocación que sucedía en los destinos, porque según el lo comprendía, nada esta completamente escrito, hay cosas que se pueden cambiar de un solo plumazo en una noche de borrachera o en un mal paso.
Esas son tres de las confusiones que ha causado en mi persona algunos acontecimientos divertidos, románticos y otros peligrosos que no he contado, estoy de prisa porque uno no sabe cuando va a morir con esto de la violencia, contaminación, pandemia y demás, pero la próxima se los cuento con mas calma y detalle, por lo pronto lo pueden creer o no, el detalle es que ustedes no tiene una imagen de mi persona ni yo una de la de ustedes, no nos conocemos, no sabemos mas nada uno del otro y sin embargo estamos comunicados por la magia de las letras, de la comunicación en linea, la curiosidad y el deseo de contar aquello que esta plasmado en la memoria con sus distorsiones normales nuestra especie.
Que la pasen bien, cuídense, un abrazo.
JuanAntonio Saucedo Pimentel.
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