Para lo que perdí

PARA LO QUE HE PERDIDO ESTANDO AHÍ 

   Los que se quedaron en el viaje, los que volaron demasiado y quedaron arriba, los que huyeron de la realidad, se perdieron en los seductores y complejos escapes de la mente y la alteración de los sentidos para creer que era una forma de entrar a mundos mejores, aquellos que soñaron al estruendo de la música de rock, danzando hasta caer agotados en conciertos que parecían no tener fin, mis conocidos, familiares, amigos, arrastrados por la ola, por la onda, el influjo de lo nuevo , de lo que deseaban experimentar, descubrir , compartir con quienes decían haber encontrado la forma para alcanzar el conocimiento de lo profundo, el pro y el contra de las cosas, la realidad mística, el encuentro con lo divino, la supra experiencia, le encuentro con lo sagrado y las consecuencias fueron funestas, se acabaron la existencia, anularon toda posibilidad de vivir plenamente, de gozar de años compartiendo las cosas agradables en el mundo, de amar y ser amados, siendo causa de atenciones forzosas, de dolores que se extendieron por el tiempo y llenaron los espacios de amargura que ya sin premura alguna se han ido desgastando y muriendo poco a poco  .

    No puedo decir que fui fuerte y me mantuve al margen, o que fue una inteligente decisión por entender el daño que me podía causar el seguirles los pasos, no, fue tal vez mas que nada suerte, un paso atrás me había quedado entretenido por el estudio y trabajo, preocupado por mejorar mi entorno, aficionado a un deporte o a las fiestas donde podía conocer a bellas mujeres que aun no eran del todo dueñas de su vida y tampoco sabía mucho de lo que era la vida, éramos inocentes en muchos sentidos, no percibimos como se derrumbaba nuestro universo, vivimos en una caja de cristal a punto de romperse y  en ese tiempo aun se respetaba a los mayores, se atendía a los buenos consejos, las costumbres, la religión tenia un lugar importante, aunque pretendiéramos rebelarnos a muchos de los paradigmas, era cuestión importante mantener la buena imagen por la familia y por el nombre, no se realmente que fue lo que me mantuvo al margen del consumo de alcohol y drogas, apenas recuerdo que intentaba detener a los que se fueron adictos cuando no sabía que tanto daño podría causarles, intuyendo que eso no era bueno, que estaban cayendo en un engaño, una trampa armada por gente sin escrúpulos , una estrategia para minar la sociedad, la familia y dejar a su merced a millones de jóvenes que en mis tiempos escuchaban música estridente con letra incomprensible por no entender el idioma ingles pero con el significado rebelde, la estruendo silencioso de una generación que cuestionaba todo, que pretendía alcanzar a super hombre mientras se hundía en la miseria de su autentica naturaleza siempre anclada en los instintos destructivos, en las guerras donde se vio la utilización de armas que no solo mataban, sembrando terror, lesiones múltiples, locura, compartida entre los contendientes en tierras que cada día parecían mas cercanas con el aumento de medios de comunicación de mayor alcance, de rapidez creciente, de mensajes que aturdían las mentes con su contenido sangriento, su alarmante pregonar de eventos que parecieran salir de los infiernos . Era el perfecto campo para sembrar la inconformidad, la desilusión, la angustia, el deseo de escapar a una realidad que no dejaba duda de que el hombre estaba decidido a exterminar la vida en su constante búsqueda de ser mas poderoso, de tener en sus manos la energía atómica que ya entonces se había utilizado matando a cientos de miles y su hongo ahora era un símbolo de poder. 

Pobre especie humana, tan alejada de Dios, tan perdida en sus locuras, transformando el Paraíso en un infierno donde la demencia era causa de admiración, la cordura de burlas y acusaciones que podía condenar a los sabios mientras se levantaba un pedestal a los asesinos. 

En ese ambiente se podía acusar a los jóvenes de buscar en las drogas un escape?, sus efímeras fugas no eran suficiente, cada vez aumentaron mas las dosis, hasta lograr perderse en el infinito inconsciente, en la penumbra de sus mentes destruidas con total auto complacencia, no había nada que les motivara a ser diferentes, el mundo era un caos, la vida no tenia sentido, el amor se había perdido entre un cósmico odio que se hizo patente en cada hora transcurrida mientras las noticas de las atrocidades cometidas en la guerra se difundían con constantemente y las protestas eran reprimidas con violencia inaudita , los jóvenes se enfrentaban a gobiernos autoritarios, corruptos, cómplices de quienes hicieron del dinero su dios, de la muerte un culto, de la corrupción una practica perfeccionada con el tiempo.

Para los que escapamos por otros medios, para los que aceptamos esa realidad y nos adaptamos a vivir en la apatía y conformismo, los que no fuimos rebeldes, los que evadimos la realidad, nos enajenamos entretenidos en la televisión, la ciencia, el trabajo, la cultura, la expresión artística, la literatura, el pretexto de ser mejores por alcanzar un éxito en cualquier campo, tampoco ha sido fácil el camino.

En qué momento perdimos a nuestros hermanos, amigos, vecinos? los dejamos en alguna parte del camino observando de lejos sus miserables existencias como si fuera un espectáculo al que no deseamos asistir. 

     Triste ha sido presenciar las consecuencias, visitas a centros de recuperación, readaptación, hospitales, funerales, saber de su miseria, de los dolores y vergüenza en sus familias, del incremento en la violencia, la desesperada agonía que se prolonga durante años, se convierte en un lastre, un problema que crece, se expande dejando un rastro de sangre sin que se tenga la posibilidad de salvarlos, de curar sus males y mitigar el dolor de todos aun cuando se pretenda ser indiferente y cuanto diga al respecto será insuficiente, cada uno de nosotros guarda un rescoldo de ese fuego que calcino la ilusión de varias generaciones. 

Hoy se pone en marcha un programa en mi país para detener esa ola de vicios, de negocios con la salud y la muerte, se hace campaña para concientizar, se abren centros de atención y se tiene la intención de ir salvando a mas jóvenes evitando que caigan en esas redes, espero que tenga éxito, tal vez sea el comienzo de una era en la que se deja de lado el sucio negocio lucrativo de las drogas y se empiece a construir un futuro con mayores posibilidades de ser productivos, sobre todo, que se tenga la oportunidad de vivir en paz, en buenas relaciones con la familia y la sociedad, en fin, que se viva plenamente, no se si ha de poder revertirse el daño, pero hay una esperanza, una luz en el camino que provoca a quienes tienen la ilusión de alcanzar una mejor vida, eso ya es un buen comienzo.